31 enero 2006

VALHALLA "The Aftermath"

(Grabasonic)

Es una verdadera pena que los excelentes trabajos de Valhalla estén teniendo durante estos años tan poca repercusión. Supongo que el hecho de estar afincados en Vizcaya dificultará la promoción al resto del país, y no hablemos de la falta de apoyo de las compañías. Pero, con tantas adversidades, no han dejado de sacar nuevos discos, esta vez con un sello ignoto, no me sorprendería si luego me enterara de que el CD es autoproducido. Confío en que no tiren la toalla, tanto talento tiene que dar resultados tarde o temprano. Han de conseguir como sea acceder al mercado internacional, su gran baza es la utilización del inglés. Cuando éramos una publicación impresa hicimos reseña de sus tres discos anteriores, pero, para los recién llegados, diremos que lo suyo es el Power Metal. Si nadie te dice de dónde son, les tomas por alemanes. Dentro de este estilo, siempre intentan dar cierta variedad, evitando el ser repetitivos. Esta ocasión tenemos temas rápidos y cañeros como “Enemy”. Más pesados de estribillo pegadizo tipo Hammerfall, como “Miracle” o “Memories”. Una que parece de Judas, “Inseminator”. E himnos como “Farewell” o la magistral “Time”, que es una auténtica obra maestra, sus más de diez minutos no se hacen en ningún momento largos. Si en la anterior entrega “Nightbreed” algunos de los cortes estaban dedicados al terror, esta vez varios tratan de ciencia ficción, basta con ver un título como “Lost In Space”, pero sin llegar a ser un disco conceptual. Nunca falta alguna letra de simple y puro cachondeo. En el último trabajo estaban “Raise Your Tankard” y la versión de “In The Navy”, y ahora el puesto lo ocupa “XXX”. Pero que nadie me pregunte de qué va. El que lo quiera saber que se pille el disco y así se entere, que es una oportunidad que estos chicos bien se merecen.
Nacho Jordán

PRIMAL FEAR "Seven Seals"

(Nuclear Blast)

¡Por fin! Siempre hemos dicho que los Primal Fear son una gran banda, aunque poniendo el “pero” de lo repetitivos que se terminaban haciendo sus discos. Esta vez, ya en su sexto trabajo, (o séptimo, si contamos el CD en directo que venía en el DVD “The History Of Fear”) no he tenido esa sensación. La influencia de Judas sigue estando ahí, pero creo que finalmente han encontrado su sonido propio, su estilo personal. Es sin duda su entrega más variada, y parecen haber querido recalcar esta renovación, al haber escogido como single un tema lento, que es la misma canción que da título al disco. Hay otro medio tiempo, “Diabolus”, y otro que no sabría si calificarlo como tal o como balada, “In Memory”, de verdad excelente. Por supuesto las hay que siguen una línea más cercana a la acostumbrada, como “Inmortal Ones”, la cañera “Diamons And Angels” o la marchosa “Rollercoaster”. Pero, como digo, hay mucha más heterogeneidad, “Evil Spell”, por ejemplo, prácticamente roza el trash. Lo que más me ha sorprendido, muy gratamente por cierto, es una cierta aproximación a Gamma Ray, por ejemplo en “Question Of Honour”, o en “Carniwar”, que recuerda en el estribillo a “Insanity And Genius”. Un poco como en el primer disco de la banda, donde la estancia de Ralf en los Rayos Gamma se notó más que en ninguno. Insisto en que la palabra que más define esta entrega es variedad, y eso lo notamos mucho los que nos molestamos en leer las letras. Casi siempre se han limitado a hablar de imaginarios mundos de pesadilla, de la proximidad del fin de la existencia. Esta vez, aunque hay alguna que se cuela en este plan, también hay otras temáticas, como el amor, la traición, la dependencia de las drogas, los vampiros, y, sobre todo, mucha más esperanza aun en medio de los escenarios apocalípticos habituales. El mejor ejemplo es la maravillosa “Al For One”, que hubiera sido un excelente single. No hay ninguna pega a la que encontrar a este trabajo. Se incluye el vídeo clip de “Seven Seals”, y la presentación es una maravilla, un increíble digi-book con papel satinado, de verdadero lujo. No se me ocurren mejores formas de luchar contra el pirateo.
Nacho Jordán

MAGO DE OZ "Gaia II - La Voz Dormida"

(Dro / East West)

A lomos de la escudería de una multinacional nos llega la segunda entrega de la trilogía “Gaia”, un lujoso doble álbum impecablemente presentado, que debido principalmente al reseñado cambio de compañía discográfica supone para el combo madrileño una nueva etapa en su ya dilatada trayectoria. Si en la primera parte de la compleja obra el grupo destacaba la acción destructiva del hombre sobre la Tierra, incluyendo pasajes donde condenaban la pena de muerte y que desembocaba en una historia que se remontaba al año 1500, y la devastación ejercida por Hernán Cortés sobre los pueblos indígenas, en esta segunda hacen especial hincapié en la hipocresía de la jerarquía de la Iglesia, además de una forma valiente y sincera, una postura digna de alabar debido a su actual status mediático y atreverse a arremeter contra el poder establecido cuando lo fácil para ellos en este momento hubiera sido acomodarse, pero nada más lejos de esto último, han sacado a la superficie toda su rebeldía, inconformismo, y su actitud rockera en definitiva. Creo además que las alusiones incluidas en la nueva remesa a Goya, Beethoven, al “Fausto” de Goethe, la Inquisición, las dictaduras, y esas idas y venidas de tiempos remotos a la actualidad insertadas en el álbum, y ese hilo conductor que presenta a una persona que sufre síndrome de Dawn, como reacciona esta ante una pintura del genial pintor aragonés, y como predice la fecha y hora exacta de la muerte el Papa, y como entra en escena el personaje de Azaak procedente de la primera parte de “Gaia” tiene un mérito considerable. En cuanto a las piezas que configuran el entramado hay que destacar por lo general lo acertado de su composición y la muy buena producción a cargo de Big Simon. La Preproducción se realizó en los estudios Korsakov de Kosta Vázquez (Boikot) y para la grabación en los estudios Sonoland se emplearon cinco meses y un presupuesto de catorce de nuestras antiguas y añoradas pesetas, finalmente se masterizó satisfactoriamente en los estudios M-20. Otro acertado aliciente reside en las colaboraciones y en los músicos invitados: Leo Jiménez (Saratoga, Stravaganzza), Víctor García (Warcry), Carlos Escobedo (Sober, Savia), Beatriz Albert (Ebony Ark), Patricia Tapia (Nexx), Aurora Beltrán (Tahúres Zurdos), Joaquín Arellano “El Niño” (Cuatro Gatos), Tony Manguiano (Ex Golden Farm), gente de la banda folk Luar Na Lubre... y se quedaron fuera gente como Carlos Núñez y José Mercé, aunque este envió a su guitarrista Moraito Chico. Profundizando en los temas, “Volaverunt Opus 666” con arreglos orquestales a cargo de Mohamed y Pepe Herrero (Stravaganzza), es una intro que da paso a “La Voz Dormida” un corte directo duro y contundente dirigido a la Iglesia y los dictadores con mensaje incluido para Franco y Pinochet. “Hazme un Sitio Entre tu Piel” es fresco, tierno, melódico y accesible, que contrasta con “El Poema de la Lluvia Triste” con inicio relajado y operístico, pasajes progresivos, y cambios de ritmo con cierto predominio de teclados. “El Callejón del Infierno” es un excitante huracán instrumental inspirado en un lugar esotérico existente en Toledo y que recuerda la maestría musical de la escuela Michael Schenker. Una estructura muy a lo Rainbow época “Difficult to Cure” contiene “El Paseo de los Tristes” inspirado en la bella ciudad de Granada, mientras que la nota festiva y juerguista llega a renglón seguido con “La Posada de los Muertos”. “Desde Mi Cielo” se muestra como una bonita balada, apasionada y dedicada a la memoria de su amigo, periodista y escritor, Juan Diego Caballo, y para dar carpetazo al primero de los discos que integran la entrega “En Nombre de Dios”, adaptación del clásico “Gates of Babylon” de la banda de Ritchie Blackmore y su mágico arco iris, con letra convertida en un feroz ataque a la Iglesia por su cinismo e hipocresía, con participación de Carlos Escobedo y Joaquín Arellano. La introducción “Incubus y Súcubos” indica que entramos de lleno en el segundo disco, ésta da paso a “Diabulus in Musica” corte intenso y especia de bacanal de pasión con excelente aportación a cargo de Beatriz Albert y Patricia Tapia, indudablemente dos voces privilegiadas. Curiosa resulta “Mañana Empieza Hoy”, versión del “Hymn” de Ultravox que también han grabado recientemente los alemanes Edguy, una composición pegadiza y un claro guiño a la esperanza y el optimismo y que surge debido al cariño que tiene el grupo a ciertas canciones de los años 80; por cierto, tienen pensado registrar “Take On Me” de A-Ha. A base de inconfundible guitarra flamenca rebosa estilo la introducción “El Príncipe de la Dulce Pena” con Moraito Chico como protagonista, dando paso a “Aquelarre” incitando al sexo y poseedora de una densa capa, con Natalia Martín y Diana Navarro realizando una notable tarea. “Hoy Toca Ser Feliz” es el toque más folk del disco, mientras que “Creo (La Voz Dormida)” aparece dotado de relajada brisa. “La Cantata del Diablo” cierra la obra, una pieza intensa y ampliamente extensa, veintiún minutos largos de duración, una propuesta arriesgada aunque perfectamente ensamblada con aparición estelar de Aurora Beltrán, Leo Jiménez y Víctor García, realizando todos a la perfección su papel interpretativo. La ligazón plena a la cultura en general y a la historia y la literatura en particular ha engrandecido el mensaje de Mago de Oz, dirigido en la mayor parte de las ocasiones a un público joven que como receptor y tras escucharlo, muy posiblemente piense por sí mismo, porque “Gaia II – La Voz Dormida” tiene ingredientes de sobra para eso, para pensar, meditar y recapitular. Un trabajo construido con tesón por una formación que ha ganado muchos enteros con la plena adaptación del guitarrista Jorge Salán que pone su arte y creatividad, y que lógicamente continua teniendo en la mente y la pluma de Txus su principal resorte efectivo, todo un “ladrón de palabras, y secuestrador de ideas y melodías”.
José Mora

HANOI ROCKS "Another Hostile Takeover"

(Demolition)

Muy grata sorpresa el ultimo trabajo de los incombustibles finlandeses y clásicos Hanoi Rocks, titulado “Another Hostile Takeover”. Lejos de perder la forma, de vivir del cuento y del pasado, han publicado un disco lleno de fuerza y versatilidad, que sorprende gratamente al oyente. Canciones que pueden recordar a Turbonegro o al mismísimo Alice Cooper, pasando por el recuerdo underground y garajero de los Pixies. La voz de Michael Monroe destaca por su variedad de registros y su buen estado vocal, toda una sorpresa. La nueva formación de Hanoi Rocks incorpora dos fichajes como son Connie Bloom a las guitarras y Andy Christell al bajo. Se mantienen la contundencia de Lacu a la batería y los riffs demoledores y la actitud macarra de Andy McCoy a las seis cuerdas. Este trabajo tiene canciones de muy bien nivel, pero destaco “Back in your Face” (muy directa y demoledora, a lo Turbonegro), “Hurt” (la firmaria el mismísimo Alice Cooper), la atmosférica y ambigua “Devil in You”. También son originales e innovadores “Love” y “Reggae Rocker”. Pero destaco sobre todo la cover homenaje a Phil Lynnot “Dear Miss Lonely Hearts” (enorme versión, fiel a la original) y la balada con arreglos de cuerda y saxo titulada “Centre of my Universe”. Buen retorno de Hanoi Rocks al escaparate musical. Siempre estuvieron aquí, pero ahora reclaman su trono dentro del glam rock escandinavo. Tiembla Turbonegro.
Jesús “Nono” García

TWISTED SISTER "Under the Blade" / "You Can´t Stop Rock n´Roll" / "Come Out n´Play" (Reediciones)

(Demolition)

Reediciones remasterizadas con temas extra de la mítica banda de heavy metal americana, liderada por Dee Snider. Todos tenemos claro que, al margen de que puedan gustarte o no, Twisted Sister son leyenda, y pese a que han pasado un buen montón de años, siguen teniendo un punto de honestidad y entrega que le faltan a muchas bandas (Dokken, por ejemplo). ¿Porqué estas reediciones?. Siempre puede haber despistados que no tengan este material, o bien incondicionales de la banda que piquen otra vez con el reclamo de los temas extra. Simplemente, quitando el “Stay Hungry” (ya regrabado antes), son los mejores discos del grupo. Si te gusta el heavy metal crudo y directo escucha “Under the Blade” (1982) o “You Can´t Stop Rock n´Roll” (1983) ; después los chicos de Dee Snider evolucionaron a sonidos más hard rock y comerciales con “Come Out n´Play” (1985), con canciones más pegadizas y de radio fórmula como “The Leader of the Pack” o “Be Chrool to your Scuel” (acompañados por Alice Cooper). Como decíamos, estas reediciones son grandes trabajos en sí mismas, además de negocio. Twisted Sister, banda de heavy metal de New York, celebran ahora su 25 Aniversario reeditando sus primeros trabajos. Para sorpresa de muchos, el año pasado volvieron a los escenarios con su formación clásica: Dee Snider (voz y carisma), Eddie Ojeda (guitarra), Jay Jay French (guitarra), Mark Mendoza (bajo) y A.J.Pero (batería). El éxito de prensa y público fue notorio, volvió el espíritu Twisted Sister, con fechas y llenos por toda Europa, culminando con su actuación en el Wacken Open Air 2005 (show en directo que fue publicado en DVD). De hecho, la banda planea conciertos y gira por el viejo continente en el 2006, como cabeza de cartel.
Jesús “Nono” García

AMBITION "Ambition"

(Frontiers / Mastertrax)

Fantástico proyecto de hard rock melódico para empezar el 2006 llamado Ambition, liderado por el que fuera vocalista y guitarrista de los melódicos americanos Trillion, Thom Griffin. Aún recordamos aquella joya del A.O.R. titulada “Clear Approach” (1980), donde Griffin cantó y compuso temas soberbios. Acompañado por dos líderes del rock melódico actual, como son Tommy Denander (Say It, Radioactive) a las guitarras y Fabricio V. Zee Grossi a los teclados y bajo, Thom Griffin nos recuerda a su mejor época. Si os gustaron proyectos como Vértigo (la vuelta de Joseph Williams, ex Toto) y Over the Edge (Mickey Thomas, ex Starship) éste de Ambition les iguala o supera. Extraordinarios temas, armonía y clase en todas las composiciones y coros que arropan la privilegiada garganta de Thom Griffin. Ambition abre fuego con “Hold On”, un hit single rotundo que será sin duda una de las mejores canciones melódicas del 2006. Soberbia. Destacar otros temas es complicado, por la calidad del conjunto. Me quedo con el precioso medio tiempo “Alone I Cry” (cascada de coros), “Shaping Fate n´Destiny” (muy Survivor), la pegadiza “Together”, otra maravilla como es “Too Much” (apasionada, podrían ser muchos singles, este sería otro); “Hunger” es otra joya (un cruce entre Foreigner y Journey) para cerrar con la bala “Waiting in my Dreams”, sensible pero no empalagosa, cantada a dúo con otro gran vocalista como es Joe Vana (Meca). Decir que Jean Michael Byron (ex Toto) pone su voz en un par de canciones. Pese a publicarse a principios del 2006, estamos seguros que será uno de las mejores trabajos melódicos del año. Sobresaliente.
Jesús ”Nono” García

24 enero 2006

FARO "Agelost"

(MTM Music / Goi Music)

Curiosa la historia de esta banda, sobre todo de su vocalista y fundador Chitral “Chiti” Somapala. Un músico originario de nada menos que de Sri Lanka y que fue poco menos que el introductor del hard rock en su idioma natal en su país y que ha hecho desde anuncios de cerveza hasta canciones para campeonatos de rugby. Pero eso debía parecerle poca cosa y emigró a Alemania para formar parte de los progresivos Avalon y de los power metaleros Firewind, desembocando finalmente en su actual proyecto Faro, que recoge influencias de ambos, pero en su vertiente más melódica, con ligeros toques progresivos y una poderosa producción. “Angelost” supone la segunda entrega de Faro, tras el más que correcto “Down of Forever” de 2003, y respecto al cual a cambiado completamente de acompañantes, si en aquel los compañeros de aventura eran prácticamente desconocidos, en este se ha rodeado de nombres más reconocibles dentro de la escena hard centro europea. Tal es el caso del guitarrista Barish Kepic y del bajista Michael Müller, ambos de Jaded Heart, y del ex batería de Bonfire Dominik Hülhosrst, además de un buen número de colaboradores invitados, de entre los que destaca el guitarrista Thomas Blug que mete un magnífico solo en “The One” una buena balada semi acústica a lo Bonfire. Este tema es de lo más relajado del disco, junto con “Heavenly Light” otra bonita balada en la que destaca el trabajo en los coros de Bobby Alvatrer, Claudia Cane y Thomas Hils. El disco en general tiene fuerza y poderío para repartir, desde la intro “Desdemona” que da paso a las contundentes “Desert Moon” y “World of Fools”, con una cadencia algo pesada al igual que “Destination” una en las que se hace notar la presencia del teclista Henning Waner, que le da un aire progresivo al tema al igual que sucede en las interesantes “The Forbidden Land” con una línea melódica muy conseguida, y en las más contundentes a lo Symphony X en lo que a guitarras se refiere “Strange Dreams” y “Where Did It Go”, pero menos agresivas que las de los americanos. La voz de Chiti está a un nivel alto en todo el trabajo, pero me llama especialmente la atención en “Damned Eternally” un tema en el que juega con ella magníficamente con registros que me recuerdan al mismísimo Johnny Gioeli (Hardline, Axel Rudi Pell) dentro de una estructura de un tema de los más clásicos de hard melódico del disco, y de los más destacados. Ponen la guinda al pastel con una gran y endurecida versión del clásico de Bruce Springsteen “Dancing In The Dark”, respetando su esencia pero dándole un toque cañero realmente interesante, creo que si el Boss la escuchara le agradaría bastante. Resumiendo, buen trabajo de hard melódico, con matices y elementos que le hacen algo más original que lo que se viene haciendo en Europa últimamente, pero aun algo pesado en algunas fases y con elementos por pulir. En cualquier caso, bastante interesante.
Mariano Palomo

PARADISEND "Fin del Paraíso"

(Producciones Rockambole)

Sorprendente nuevo trabajo de los jienenses Paradisend, tras aquella primera maqueta titulada ”Heather’s Show”. Esta nueva obra se compone de cuatro temas grabados en ese mismo 2003 (y que curiosamente casi ven la luz en su día auspiciados por una discográfica inglesa), junto a otros cinco cortes registrados a mediados de 2004. Con lo cual podríamos hablar de la unión de dos tandas de demos, que han dado como resultado un CD que paradójicamente suena con bastante empaque y fuerza. Para los que no conocierais a la banda con anterioridad, los integrantes de Paradisend son: Frank García a unos omnipresentes teclados, los más discretos Ramón Castillo al bajo y J. Ángel Monereo a la batería, el fenomenal Joey Denia a las guitarras y dándole también algo a las teclas, así como el talentoso cantante Jesús Cobo. Este último sorprende por su grata tesitura vocal, muy similar a la que en su día mostrase Miguel Oñate (Asfalto) en la gloriosa y añorada etapa de ”Más que una Intención” y ”Cronophobia”; o incluso a la de Miguel Ángel Vela en Alcaudón. Todo esto entendido como un halago, obviamente. En los ocho temas y el bonus track que contiene este “Fin del Paraíso”, el quinteto despliega buenas maneras musicales cercanas en algunos momentos al hard melódico centroeuropeo (Jaded Heart, Pink Cream 69, Bonfire), caso de la inicial “Quaosar” o la potente “Cuerpo por Desnudar”; pasando por cortes más a medio tiempo entre los que destacan “Sensación” o la pegadiza “A Años Luz…de Ti” (con cierto regustillo a Sangre Azul). Dejando todas ellas un buen sabor de boca, debido sobre todo a un gran trabajo de melodías e instrumentación que se aprecia a lo largo de todo el álbum. No obstante, la inexperiencia también se nota. Sobre todo en las letras, muy monótonas y permanentemente referidas a la dualidad amor / desamor. También empacha sobremanera el exceso de teclados que aparece en la mezcla final del disco, que te hace recordar en exceso a conjuntos tecno de los años 80 (Azul y Negro, por ejemplo). Pero quizá donde han metido soberanamente la gamba sea en la duración de los temas, la mayoría de ellos demasiado largos y en ocasiones repetitivos. Aún con todo esto, nos encontramos ante un disco muy fresco, interesante y con buenas ideas. Ahora sólo les queda tener un poco de suerte y que se dejen ver por el resto de la península. Prestadles atención, ya que merecen mucho la pena.
Rafa Carrillo

AOR "L.A. Attraction"

(MTM Music / Goi Music)

Desde la publicación en el año 2000 de “L.A. Concession” se dio el pistoletazo de salida a la carrera del proyecto del músico y periodista francés Frédéric Slama bajo el nombre de AOR. Un proyecto que ha ido avanzando con el siglo XXI y que en estos días nos ofrece su quinta entrega “L.A. Attraction”, demostrándonos que la buena música no tiene por qué haberse quedado en el siglo XX y que en la actualidad se puede recuperar la esencia del A.O.R. / West Coast más tradicional de la mano de este curioso personaje que emigró hace ya diez años a Los Angeles donde ha desarrollado su carrera musical rodeado de inmejorables colaboradores dentro del género. Basta con repasar someramente los nombres de algunos de los músicos que acompañan a Slama en este disco: Tommy Denander, Steve Lukather, Michael Landau, o Philip Bardowell entre otros menos conocidos para el gran público. La verdad es que no es muy difícil adivinar por qué derroteros va ir este disco viendo los antecedentes, el equipo humano que lo ha parido e incluso su propio y esclarecedor nombre. Efectivamente A.O.R. muy próximo al West Coast más elegante ideal para saborear tranquilamente y apreciar los detalles de calidad que nos ofrece la docena de deliciosos cortes que componen “L.A. Attraction”. Un trabajo que a algunos puede que les parezca demasiado flojo, pero es que realmente estamos hablando de una música que está muy cerca del pop y que por momentos se convierte más en un factor ambiental que un trabajo que atraiga nuestra atención por su rapidez o contundencia. Aun así no está exento de fuerza, intensidad y pasión en las voces, guitarras y teclados de sus protagonistas en temas como la inicial “How Could I Ever Forgive Her”, o en la pegadizas “One More Chance” y “House of Love”. Otras como “Don’t Ever Say Goodbye”, “Tears in the Rain” o “The Spark Of My Soul” son también buenas pero tiran más hacia el west coast popero con arreglos menos rockeros, recordando más a gente como Chicago o a los Toto más poppies. Más atractiva me resultan “I Won’t Give Up On You”, “Last Chance At Love” con unos curiosos juegos de voces por encima de unas buenas guitarras, y sobre todo la intensa “L.A. Winds” y la maravilla final “Lost In Your Eyes”, una instrumental magnífica en la que se nota la mano de Lukather y Denander al más puro estilo Radioactive – Toto. Un buen disco que satisfará a los seguidores de los sonidos más suaves y ambientales dentro del rock, y desde luego nada recomendable para los buscadores de emociones fuertes, bases contundentes, y riffs veloces y pesados. Para público más tranquilito.
Mariano Palomo

19 enero 2006

SONS OF JONATHAS "The Death Dealer"

(Apache Productions / Avispa)

Bélgica no es un lugar del que estemos acostumbrados a recibir productos de Metal, por lo que resulta, en cierto modo, exótico encontrarnos con grabaciones como esta. Sons of Jonathas es el fruto del trabajo de un guitarrista llamado Xavier Carion, de nombre con reminiscencias españolas. Este personaje ya formó parte de Channel Zero, banda belga de cierta repercusión internacional, que giró como telonera de algunas bandas de renombre como Megadeth o Biohazard, pero que recogió los frutos de sus siete años de trabajo (1990-97) sobre todo en su propio país y todo el Benelux. Este nuevo proyecto de Xavier es un producto de metal extremo. La influencia del thrash metal centroeuropeo se percibe a lo largo y ancho del CD, aunque su música está más cerca del death metal. La portada de este “The Death Dealer” es más que significativa. Se trata de una pintura de burdos trazos, en la que un gran rostro central, enrojecido por infernales llamas, marcado por el sufrimiento y la violencia y rodeado por una oscuridad habitada por cadavéricos fantasmas, se alimenta de diminutas figuras humanas. De hecho, todo el diseño del digi-book, a cargo de Ronny Arjunah y Xavier Delante, pretende transmitir esa sensación de maldad y violencia, con pinturas en situación de muerte, tortura y sangre. “Final Call” es el tema que abre el disco, y una buena muestra de lo que nos encontraremos en adelante. Un tema que huele a Metallica pero con la gutural voz de Ronald Camonier dando el toque death al asunto.”Cult of Death” es más europea que la anterior, manteniendo el estilo de composición “metallicense”, pero con el típico sonido de guitarra alemán (Kreator). “Revelation of the Damnmed”, con su intro “The Return”, continúan el camino marcado por “Cult Of Death”, de corte veloz y siniestro, sin embargo “Chupacabra” se acerca más a la escuela Sepultura, con ritmos pausados y una batería, a cargo de Stef Sinhave, protagonista de principio a final. “Listen and Obey” se aleja del thrash metal metiéndose en los rápidos y poco melódicos sonidos death. “Sons of Jonathas”, da nombre al grupo y confirma la deriva hacia los caminos más extremos. La voz de Ronald surge de la ultratumba, mientras que Xavier sustituye las melodías de los primeros cortes por una mayor contundencia. El trabajo de Tom Pike (bajo) y Sinhave es más básico a la par que veloz, característico del death metal. “Connected by Blood” continúa esta caída a los infiernos de sonidos extremos y voces demoníacas. Por fin, para terminar, “House of Torment” es, como su título indica, la representación musical de los sonidos y ambientes en una casa de torturas. Stev Sinhave trata de recrear con su instrumento el sonido de látigos, o el grave rechinar de la madera, con la que están hechas las máquinas de tortura, en funcionamiento. El corte, que no se puede considerar canción, logra dar el fin tétrico y macabro que Carion, sin duda, deseaba. En fin, un disco de death metal con influencias thrash... y viceversa. Las letras de todas las canciones están escritas por un personaje externo a la banda, llamado Stef “Hunter” Linskens, y en ellas la muerte, el infierno y la violencia no se echan en falta... ¡¡Joder, qué miedo!!
Carlos Treviño Cobo

FIRE TRAILS "Third Moon"

(Underground Symphony / Avispa)

“Tercera Luna” es el título del segundo trabajo de estos italianos, que tienen en su vocalista Pino Scotto a un líder indiscutible, con una larga e importante trayectoria, al menos en su país. De hecho, el primer disco de la banda no fue más que la regrabación de temas del anterior grupo de Pino, Vanadium, para el que contaron con la colaboración de Danny Peyronnel en algún tema. La anécdota nos la encontramos al reproducir la grabación en un PC. Mientras suenan los temas de Fire Trails, podemos leer en pantalla que el grupo es Kiss, y el LP “Rock and Roll Over”, disco con el que poco o nada tiene que ver el trabajo de los italianos. Aunque en este “Third Moon” no hay colaboraciones, tampoco es que hagan mucha falta, pues Scotto se ha sabido rodear de un elenco de músicos desconocidos, al menos en nuestras tierras, pero de calidad. Se trata de una obra conceptual compuesta a medias por Pino Scotto y Steve Angarthal (guitarra) que recoge todo el sabor y el color del hard rock y el heavy metal más tradicional. Angarthal, que pone la voz del narrador a lo largo de todo el CD, abre “Third Moon”, que es el título del tema que abre el CD, y la innegable influencia de Rainbow o Sabbath dice mucho de lo que vamos a escuchar. “Spaces and Sleeping Stones” es un corte rápido en el que destaca la labor del batería Mario Riso, que es uno de los invitados en la grabación, pues, según nota de prensa, a la hora de meterse al estudio estaban sin percusionista. “Fighter” podría estar en cualquier álbum de Rage, y lo cierto es que a la tercera canción ya podemos confirmar que el líder, vocalista y compositor de la banda... no tiene buena voz. Aunque los temas están compuestos para el cazallero timbre de Scotto, y que suelta algunos agudos interesantes, dudo que su voz, muy rota, de la talla en directo. Sin embargo el resto de la banda ralla a un gran nivel. Steve Angarthal, no puede negar su gusto por Blackmore. Tato, el otro batería invitado, es tan bueno como Mario. En “Brave Heart” Larsen Premoli, teclista, tiene oportunidad de mostrar su excelentes habilidades. El quinto corte se titula “Sailor and Mermaid”, y es un medio tiempo en el que la sólida base rítmica formada por Frank Coppolino (bajo) y Mario Riso, son excelente sustento para los solos de Angarthal y Larsen. Pero el mejor tema del cd es sin duda la instrumental “Reaching for the Sky” (¿será porque Pino no canta?), en el que los cuatro instrumentistas (Tato a la batería) dan rienda suelta a sus egos con fantásticas melodías, que recogen todos los sonidos del Hard Rock de los 70 y 80. “Silent Heroes” es un tema hardroquero, de corte épico, con destacables arreglos de guitarra acústica y estribillos muy cantables, aunque, en realidad, esto último es denominador común en todo el disco. “God of souls” destaca por el explosivo riff inicial de Angarthal, así como el solo de guitarra, estilo Malmsteen, o el de Larsen , a lo Jordan Rudess (Dream Theater). “Stronghold” nos propone el sonido heavy ochentero, para introducir variaciones instrumentales de corte virtuoso, y, en el caso de Larsen, cercanas al jazz. “Freedom Tribes” comienza con una flauta, que quizás interprete Larsen con el sintetizador, y una vez más, el sonido Rage es el cuerpo sobre el que trabajan Pino y Angarthal en la composición. El epílogo tiene forma de lento medio tiempo titulado “Wise Man Tale”. De corte épico, no tiene una especial relevancia instrumental aunque sí que recoge perfectamente todo el espíritu hardroquero de todo el trabajo.
Carlos Treviño Cobo

PHENOMENA "Psycho Fantasy"

(Escape Music / AOR Heaven / Goi Music)

Cuarta entrega después de un montón de años del proyecto Phenomena liderado por el ex Trapeze Tom Galley. Y parece que el tiempo no ha pasado en balde y la brillantez y creatividad de Tom se han oscurecido desde aquellas maravillas que fueron la trilogía inicial de Phenomena en los 80’s. Este “Psycho Fantasy” aun teniendo buenos matices y cosas interesantes, no podía ser menos con la nómina de integrantes del proyecto, no llega al nivel de sus predecesores en la saga. De un disco en el que se encuentran talentos de la talla de Glenn Hughes, Tony Martin, Keith Murrell, J.J. Marsh o el propio Mel Galley, hermano y mano derecha del compositor y productor de la obra, uno esperaba mucho más de lo que se ha encontrado. Los temas en su mayoría se me hacen demasiado espesos, sin chispa, adolecen claramente del gancho de los de las anteriores entregas de esta saga conceptual. A pesar de ello se nota el trabajo invertido, las buenas intenciones de Tom Galley y la buena labor de los grandes cantantes que participan en la obra. Pero los temas.... no están a la altura salvo honrosas excepciones, como “Touch My Life” muy a lo Glenn Hughes de la última época, “So Near So Far” un medio tiempo con tintes épicos y que podría pertenecer a cualquiera de las entregas anteriores de Phenomena, “Chemical High” que tampoco está mal por el estribillo aunque no acaba de romper, y sobre todo “Higher” en la que los teclados rivalizan con la voz de Hughes en plenitud, muy interesante. Lo intentan también pero no acaban de conseguirlo con la lenta “How Do You Feel” a pesar de la buenísima aportación de “La Voz del Rock”. El resto navega entre buenas intenciones y flojos resultados, demasiada espesura, como en el medio tiempo con voz femenina “60 Seconds” o como en “Killing For The Thrill” y en “God Forgives” con un inicio muy moderno y que luego se embarullan sin demasiado sentido. Quizá con alguna escucha más el disco acabará entrando más, pero el fin y al cabo no deja de ser una decepción la que nos hemos llevado los que estábamos esperando como agua de mayo esta nueva entrega. Por desgracia no ha resultado ser tan “fenómena” como hubiéramos deseado.
Mariano Palomo

18 enero 2006

BRAVE NEW WORLD "Monsters"

(Lion Music / Goi Music)

Bajo la denominación de Brave New World encontramos la continuación del proyecto Passion Street, una banda de A.O.R. británica a lo FM liderada por el vocalista Rick Cartey que publicó un único disco a mediados de los 90’s. Y la verdad es que de aquel proyecto de hace más de diez años no queda demasiado, aparte del propio Rick. Por una parte para bien, ya que la producción y sonido de este “Monsters” mejora bastante el del único trabajo de Passion Street, “Million Miles Away” que era realmente pobre; pero por otra parte las composiciones han perdido frescura con respecto a aquellas de puro A.O.R., introduciéndose en terrenos más actuales y progresivos con irregular éxito, eso sin con una buena dosis de melodía en todos los cortes del álbum. Unos cortes que ganan mucho en potencia gracias sobre todo a la buena labor del guitarrista Pat Heath con una importante cuota de protagonismo a lo largo del trabajo y que se presenta como una interesante hacha dentro del panorama británico, algo que pudimos comprobar además en directo en la última venida a Madrid de Vaughn con el que realizó una notable actuación. La formación la completan el teclista Cris J Playle, que ya acompañó a Cartey en Passion Street, y los desconocidos Stu Brown a la batería y Tommy Folstadl al bajo. Los temas en general se hacen un poco largos y monótonos, a pesar de que la cosa empieza prometedora con la directa “Knife In My Back”, en la que empezamos a apreciar la potencia de la guitarra de Pat junto a la voz de Rick en su versión más rasgada. “Arabia” es una buena continuación, más lenta, con arreglos árabes, lógicamente, y con toques más progresivos. La cosa se empieza a espesar más con “Strange Days”, un tema que siendo de los más cortos del disco es de los que más largos se me hacen. Se arregla con “I Want You”, con una línea más melódica con toques progresivos a lo Queensryche o Balance of Power, bastante bien llevada y con buenos arreglos de teclado. Vuelven a perderse en temas largos sin demasiado gancho con “Dreams Never Die” con un estribillo cansino como pocos, y con la pesada “Walls Come Down” en la que se salva una vez más el solo de Pat Heath. Recuperan algo de brillantez en “All The Heroes” con unos teclados más alegres que dan entrada a uno de los temas más accesibles y con los mejores coros del redondo, para un buen tema de hard melódico. “The Other Side” tampoco está mal, un poco más dura pero bastante correcta, aunque algo larga. El cierre a esta irregular obra lo pone “(Into The) Age Of Chaos” más de seis minutos y medio de experimentación sin mucho sentido que no acaba de cuajar y que podría resumir lo que es este “Monsters”; un disco con momentos interesantes, buenos instrumentistas, sobre todo y reitero el guitarrista Pat Heath, pero con no demasiada brillantez compositiva en toda la obra. Mucho margen de mejora por delante para Brave New World.
Mariano Palomo

JOHNNY LIMA "Vesion 1.2"

(Escape Music / Goi Music)

Tras la publicación hace un par de años del variado y más experimental “Made In California”, nos reencontramos con la vena más tradicional de este rockero americano de la mano de este nuevo trabajo. Aunque la historia tiene truco, ya que este “Version 1.2” no es más que una regrabación de los temas de su buscadísimo debut discográfico homónimo de 1996 y que ahora se ve completado con un par de temas que no aparecían en el mismo, aunque por el contrario se dejan fuera uno de aquel, y con pequeños retoques en cuanto a arreglos y letras se refiere. Para los que conozcáis el disco poco os puedo contar de él que no sepáis ya, para los que no, deciros que es el disco perfecto para los que añoramos a los Bon Jovi de la mejor época, al Sr. Lima sólo le falta empadronarse en New Jersey para tener más cerca a su ídolo. Las composiciones, la voz, los coros (más Def Leppard en algunos casos), hasta las guitarras suenan a Bon Jovi pre “Keep The Faith” por todos lados, pero con el mérito de no sonar a ningún tema de Bon Jovi en concreto. Es bastante complicado destacar cortes, ya que todos mantienen una línea bastante uniforme, desde la inicial “Never Gonna Let U Go” percibimos la frescura y gancho de este chico que se encarga prácticamente de todo en el disco, voces, coros, guitarras acústicas y eléctricas, bajo y teclados, y al que acompañan el batería Bernie F. Díaz, el guitarrista encargado de los buenos solos Craig Takeshita y el corista Ryan Freeman. “Little Runaway” sigue siendo de las interesantes en la onda más hard melódica junto a “Fire Of Love” y los medios tiempos “Drift Away” y “If I Had a Heart” en los que se combinan acústica y eléctrica fantásticamente, sobre todo en la primera. Tira de registro más rockero y cañero en “Rock’N Roll River” perfecta para el directo y el bailoteo. Más cañera y dinámica es también “Reckless Heart” al igual que “Into Your Arms” y en “Something’s Gotta Change” en las que los coros son más Def Leppard que nunca. Pero ¿Qué sería de un fan de Bon Jovi sin baladas?, pues evidentemente las hay en este disco, “Here For You” preciosa, con una intensidad remarcable en las guitarras a pesar de ser una balada, “Fire Of Love” también cumple aunque es un poco más floja predominando los sonidos acústicos por encima de los eléctricos, y la que cierra el disco “Fly Angel” que deja el protagonismo a la voz de Johnny junto al piano haciéndose un poco monótona. Como podéis comprobar este trabajo no va ser considerado el más original del Mundo, pero buenos temas y calidad tiene como para llamar la atención de los nostálgicos de los buenos tiempo del hard melódico americano, y además servirá para que muchos que andaban como locos buscándole por fin lo tengan en sus manos. Al que no le guste Bon Jovi, mejor que se abstenga.
Mariano Palomo

IAIN ASHLEY HERSEY "The Holy Grial"

(Lion Music / Goi Music)

Segunda entrega de este guitarrista americano con nombre de difícil pronunciación, y que en mi opinión mejora sensiblemente su debut discográfico de hace cinco años. Sin separarse de la línea de hard rock de escuela clásica británica marcada en aquel “Fallen Angel”, encontramos unos temas más intensos y compactos, con protagonismo evidentemente para Iain y su guitarra, pero con participación activa e importante de un buen número de invitados a la fiesta. Lo más destacable a primera vista viendo los créditos del disco es la participación en el mismo de cuatro vocalistas, sobre todo uno de ellos, el gran Graham Bonnet que pone su voz a tres de los doce cortes del trabajo. Aunque por desgracia no encontramos al Graham Bonnet brillante de otras ocasiones, más bien le noto muy chillón y oscuro para lo que acostumbra, más en la onda de lo que hizo con Blackthrone que lo que era en Rainbow o Alcatrazz, sobre todo en la cañera “Walking The Talk”. Su huella queda también reflejada en la bluesy “Going Down” en la que toma protagonismo el piano junto a un solo Iain de los más sucios pero con más feeling del disco, y en la que le da título “The Holy Grial” en una onda más hard rockera tradicional, con buena presencia de teclados, aunque sin acabar de romper. Volviendo con los cantantes, otro conocido es Carsten “Lizard” Schulz vocalista de Domain y Evidence One que pone su rasgada y poderosa garganta al servicio de otros tres temas, “Empty Planet” que es de lo mejorcito del disco con aire a lo Joe Lynn Turner total sobre todo por los coros, “Lost And Foolish” con un cierto aire místico de lo más interesante y con un pegadizo estribillo hard rockero, y “Calling For The Moon” un tema menos directo pero igual de intenso. Los otros dos vocalistas en cuestión eran absolutamente desconocidos para mi hasta ahora, el señor David “Swan” Montgomery y el señor Randy Williams. Y la verdad es que ambos han supuesto dos gratas sorpresas, sobre todo el primero con un marcado aire a lo Glenn Hughes que se observa desde las primeras estrofas de “Blood Of Kings” uno de los tres temas a los que pone su voz y que abre brillantemente el trabajo, “In The Light” sigue la línea, algo más dinámico y con unos teclados a lo John Lord que recuerdan a Purple por todos lados, y “To The Sea” se hace un poco más pesada aunque la voz de Montgomery sigue muy bien. Randy Williams sólo canta en un tema “Blink For an Eye” pero le basta para dejar su tarjeta de presentación, mostrándose como un interesante vocalista dentro de registros más melódicos y que se adapta a la perfección a este buen medio tiempo. El resto de la banda que acompaña a Iain en esta grabación me resulta completamente desconocida, con el batería Tony Medeiros, los bajistas Dave Sutton y Paulo Gustavo, y con nada menos que tres teclistas, algo que se hace notar a base de bien en todo el disco. Por supuesto no podían faltar las piezas instrumentales dentro de un disco de un guitarrista, y la verdad es que como curiosidad no están mal, pero prefiero los temas antes comentados. Iain incluye para su lucimiento personal la archi conocida “Toccata In D Menor” que no es que le quede demasiado bien solo con su guitarra, las cosas como son, y se explaya a gusto en la final “Auf Wiedereshen” de más de siete minutos y en la que mejora bastante en una onda más fusionera ya acompañado por algún músico más. Concluyendo, un interesante disco que puede llamar la atención de los seguidores del hard más clásico de la escuela Purple.
Mariano Palomo

17 enero 2006

CASKARRABIAS "Bastante"

(Pies Cia. Discográfica)

Caskarrabias son un grupo de actitud, de compromiso, de rock urbano de los de siempre. Castigados por el destino y por las modas, no recogen todo el fruto que su comportamiento, que su trabajo y que su música, cargada de mensaje y de rock de barrio, merece. Los que amamos el espíritu de Leño o de Topo, por ejemplo, sabemos qué significan esas letras y qué sentido tiene la música sobre ellas, y por eso jode que, después de cuatro discos y múltiples conciertos, tengan que currárselo como si fueran casi principiantes. Podría parecer un tópico si digo que “Bastante”, el cuarto trabajo de estos madrileños, es su mejor disco, pero con escuchar el corte que abre fuego, “Comenoches” (riff a lo Purple) o la sincera “Lucifer” ya sabes que tienes en tus orejas rock urbano auténtico, del bueno. Caskarrabias son dignos herederos, un híbrido entre los Burning y el mejor Rosendo. Letras del día a día, canallas, cuentan lo que nos pasa a todos (o nos gustaría que pasara). Ese rock visceral, madrileño y directo, que llega al corazón del oyente. También me gustan “Sirena de Boulevard” y “Pide un Deseo”, pero destaco “Tu y Yo”, claro homenaje y guiño a los Burning o la guapísima versión del “Rey del Glam” de Alaska, tan diferente y rockera a la original, pegadiza como pocas. Ahora bien, la joya del disco está en “Jueves 11”, una canción inmensa (dedicada a las víctimas del 11M), cruda, hermosa y lírica, que cuenta con las colaboraciones de José L. Jimenez y Lele Laina (Topo, Asfalto), Johnny (Burning) y Paco Laguna (Obús). Una canción inolvidable, de lo mejor que siempre hayan escrito Caskarrabias. Este trío madrileño son T. A. Lago “Kake” (voz y guitarras), Juanpe Lago (voz y bajo) y Juanjo Concha (Batería). Gran disco este “Bastante”. Un disco que si ahora moviéramos el calendario, pudiéramos retroceder el tiempo 15 ó 16 años y estuviéramos en el Hebe y tomando litros con los colegas en el parque Azorín, se comería el mundo. Se lo merecen.
Jesús “Nono” García

SPEEDY GONZALES "Electric Stalker"

(Metal Heaven / Goi Music)

Viendo la nómina de excelentes músicos, todos ellos vinculados al scandi A.O.R., que forman este proyecto llamado Speedy Gonzales, sin duda piensas que su música será más o menos un calco de los grupos en los que han estado, es decir, Talisman, Talk of the Town o Radioactive, por ejemplo. Sin embargo, este “Electric Stalker” destaca principalmente por su dureza y su fuerza, y por su variedad de estilos, que van desde el heavy más rotundo y clásico a profundos pasajes melódicos. Deciros que no se trata de una reedición, sino de un nuevo disco, eso sí, con temas compuestos en los 90 y remezclados ahora para la ocasión. Esos años han suavizado el espíritu y el gusto musical de sus componentes. Por ejemplo, del guitarrista y compositor Tommy Denander, que nos demuestra aquí su faceta más dura y eléctrica, nada que ver con sus proyectos melódicos en AOR, Radioactive o Ambition. Lo mismo para el batería Daniel Flores (Talk of the Town) o para el polifacético bajista Marcel Jacob (Human Clay, Talisman). Sin embargo, Thomas Vikstrom sorprende menos, porque ya conocemos lo ecléctico que puede ser, siendo tremendamente duro o doom (Candlemass), heavy melódico (Stormwind o Brazen Abbot) o muy melódico (Talk of the Town). Por eso, en un proyecto tan versátil y variado como Speedy Gonzales, el Sr. Vikstrom se mueve como pez en el agua. El disco abre con una canción directa y hard , “Flash of the Blade”, para sorprender con la metálica “Desires of the Flesh” (Vikstrom recuerda con sus agudos a King Diamond) o la cruda “Electric Stalker”. Se suavizan los ánimos con “Do You Know Where the Kids Go”, para dar paso a un remake de la inolvidable y melódica “Free Like an Eagle” (Talk of the town). El trabajo retorna su pegada y su lado heavy con “Dominador” (muy pegadiza), para volver a las melodías y teclados (poco presentes en el disco) de “Spit in the Hand that Feeds You” o la armónica “Make Love in Red”, para retornar sin respiro a la poderosa y propagandística “Shock the Nation”. En definitiva, un proyecto llamado Speedy Gonzales, gestado en los 90 y remezclado y parido a finales del 2005, que sirve para presentarnos a músicos consagrados que tenían otros modos y otros gustos musicales diferentes quizás a los de hoy en día. Sin duda, la faceta más cañera y eléctrica de un grande del rock melódico actual: Tommy Denander.
Jesús, Nono, García

16 enero 2006

SEPULTURA "Live In Sao Paulo"

(SPV / Mastertrax)

Se acercan fechas importantes para Sepultura y sus fans. Por una parte, la inminente publicación de su nuevo trabajo en estudio “Dante XXI”, y por otra, la visita a nuestras tierras como teloneros de In Flames, el próximo mes de marzo. Sin embargo lo que aquí nos ocupa no es otra cosa que la edición de este doble cd en directo que quiere cerrar el exitoso periodo que siguió a la edición de “Roorback” (2003). Con las fenomenales vibraciones que nos dejaron en el impresionante concierto del Metalmanía 2004, me dispongo a revivir aquella mítica cita... y debo reconocer mi desilusión. Este disco no recoge, bajo ningún concepto, lo que esta banda nos dio aquella tarde de hace año y medio. Resulta evidente que las pretensiones de la banda pasaban por recoger toda la crudeza y rotundidad de un directo de Sepultura, y para ello han decidido pasar de arreglos y medios técnicos que mejoraran la grabación. Por ello lo que se nos ofrece no tiene la calidad sonora exigible para una banda de su nivel. En muchas ocasiones me asalta la sensación de estar escuchando un bootleg, una grabación pirata sacada de una mesa de sonido... yo los tengo que suenan igual que este "Live In Sao Paulo". Lo que se nos ofrece es un concierto íntegro, celebrado en su ciudad natal, el 4 de abril de 2005. Los temas han sido seleccionados para ofrecer una representación de toda la carrera de la banda. Desde su primer E.P. “Bestial Devastation”, del que interpretan “Necromancer” y “Troops of Doom”, pasando por su primer gran himno “Escape to the Void” (Schizophrenia ’87) y, como no, “Innerself” y “Beneath the Remains” del “Beneath...”, así como “Arise”. Del “Chaos A.D.” son “Refuse Resist” o “Territory” y del “Roots” nos encontramos otro espléndido himno, “Roots Bloody Roots”. Tras la marcha de Max Calavera, entra en la banda el estadounidense Derrick Green con el que graban “Against”, “Nation” y “Roorback”. Si de los dos primeros apenas hacen una reseña con temas como “Reza”, “Choke” y “Sepulnation”, del último interpretan “Apes of God”, “Mindwar”, “Bullet the Blue Sky” (U2) y “Come Back Alive”. En total son 12 los temas de la época de Max Calavera, que ocupa 10 años (’86-’96) y 6 discos; y 8 de Derrick con 3 discos en 8 años. El sonido industrial que poco a poco ha ido inundando la música de la banda, se deja sentir en esta grabación, mucho más de lo que yo ví y escuché en el 2004. Las guitarras de Andreas Kisser y D. Green son muy sucias, mientras que la batería de Igor Calavera parece de lata, y los platillos tapan en muchas ocasiones el resto de la música. El trabajo de Paulo Pinto es difícilmente apreciable mientras que la voz de Derrick está tremendamente desmejorada. Sin duda los dos mejores cortes del doble directo son “Reza” y “Biotech is Godzilla”, en los que Gordo, de Ratos do Porao, realiza una más que destacable aportación al evento. Este directo no refleja, al menos no en su totalidad, la verdadera calidad de la banda sobre los escenarios, aunque los incondicionales verán satisfechas sus ansias de Sepultura hasta “Dante XXI”. Por cierto, espero que el “Live In Sao Paulo” puesto a la venta tenga una presentación más digna que la promo llegada hasta nuestras manos, que no contiene ninguna información sobre absolutamente nada, ni tan siquiera los miembros de la banda, colaboraciones o lugar y fecha de grabación... bueno... los títulos de las canciones sí están.
Carlos Treviño Cobo

09 enero 2006

THE TANGENT "A Place In The Queue"

(Inside Out / Mastertrax)

Tengo el honor de hablaros en estas líneas de la primera joya del 2006. Andy Tillison es el director y máximo líder de este “destello” de genialidad que bajo el susodicho nombre nos ofrece un trabajo de música progresiva en el más amplio sentido de la palabra. Tercera obra de los británicos, o cuarta si contamos el directo “Pyramids and Stars”, y probablemente el más versátil de todos ellos pues en el se conjugan, a golpe de virtuosismo, estilos que podrían parecer inicialmente poco compatibles. Son 79 minutos de pasión por la música, mostrada en siete cortes sin igual. Ya desde el principio, con “In Earnest” (20 minutos), nos encontramos con un grupo deseoso de explorar todos los aspectos de la fusión en su más alto concepto. Desde el funky más setentero, pianos que hacen soñar con sus positivas melodías, instrumentos del Folk o la clásica, como saxofones, flautas ó clarinetes (Theo Travis), pasando por momentos de electrizante rock sinfónico, fantásticos riffs de guitarra y progresivos cambios de ritmo; este primer corte es de lo mejor que he escuchado en mucho tiempo. Jonas Reingold, bajista de The Flower Kings, realiza una auténtica exhibición instrumental, acompañado del nuevo batería Jaime Salazar (sustituto de Zoltan Csorsz, que ha centrado sus esfuerzos en The Flower Kings). Sam Baine, compañero de Tillison desde los tiempos de Parallel or 90 Degrees (la banda matriz de The Tangent), se ocupa de los sintetizadores, coros absolutamente espléndidos, y del piano, con el que protagoniza grandes pasajes, entre ellos algunos de jazz realmente inconmensurables. Esta obra maestra, con la que se abre el disco, es seguida de “Lost in London”, un tema en el que predomina el jazz vocal (Fred Astaire, Frank Sinatra), aunque aderezado con rock celta (Jethro Tull) y algo de rock sinfónico psicodélico (Genesis de los primeros 70). Compuesto a medias entre Tillison y Guy Manning (guitarras acústicas, mandolina, etc.), no es más que otra fantástica exhibición de Salazar en la percusión y Baine al piano. “GIY Surgery” dura dos minutos y podría ser una “ida de olla” jazz-sinfónico-psicodélica que da paso a “”GPS Cultura”, un tema sinfónico británico que encajaría perfectamente en cualquiera de los primeros trabajos de Genesis. Destacan los coros, simplemente maravillosos, así como unos teclados ingeniosos, que dan la adecuada y siempre optimista ambientación, sello inconfundible de la banda. Vuelve a predominar el rock sinfónico y el jazz en “Follow your leaders”, si bien, no dejan de surgir cambios de ritmo que dan pié a todo tipo de influencias sonoras. Sin embargo todo cambia con “The Sun In My Eyes”, un tema de corte funky en el que, sin abandonar el característico sonido de la banda, ahondan en los ritmos sesenteros de la mítica Motown y toda su extensa lista de músicos que supieron adaptar el soul a los nuevos aires roqueros de la época. La voz de Tillison es el contrapunto, con una tesitura de voz distinta a lo que acostumbramos a oír en el funky. El tema de cierre da título al disco y, en su casi media hora, profundiza en todo lo oído hasta el momento, tocando todos los palos ya mencionados en una ó más ocasiones, lo que te permitirá apreciar la gran calidad que atesoran todos y cada uno de los músicos que hacen de este “A Place In The Queue” un disco prácticamente inigualable e incomparable. Podrás ponerlo junto a los discos de jazz, a los de rock sinfónico o a los progresivos... y no desencajará, porque es todo eso y más. Bravo por Tillison.
Carlos Treviño Cobo

MICHELE LUPPI’S HEAVEN "Strive"

(Scarlet)

En un mercado discográfico cada vez más saturado por novedades, reediciones, directos, proyectos y demás, resulta difícil prestar la debida atención a obras tan completas y satisfactorias como el debut en solitario del vocalista italiano Michele Luppi. Y es que este "Strive" es un compendio de temas melódicos que se mueven entre la baladita caldosa a lo George Michael (eso sí, con una clase excepcional) y el RnR más desenfadado que recuerda vivamente a los añorados Boston. Así que quien pensara que este álbum sería una prolongación de su trabajo con Vision Divine estaba pero que muy equivocado... “Strive” está además producido y mezclado por el propio Luppi, reclutando a tal efecto a un larga pléyade de músicos entre los cuales destacaría al prolífico Alex De Rosso (Dokken, Headrush), o sus compañeros en Vision Divine: Olaf Thorsen (guitarra) y Oleg Smirnoff (teclas). Obviamente, Luppi despliega todo su poderío vocal en diez temas hechos a su medida y en el cual nos hace conscientes de su nivelazo como cantante. Entre los cortes que componen el disco, podríamos destacar las marchosas y animadas “Trust” y “Stars”, los impecables medios-tiempos “Always Remember You” y “Time For Love”, o cristalinas baladas como “Wasting My Time” y “I Find My Way To Pray“. Como no, también se permite el lujo de meter algún caprichito, caso de “Feel Alive” o “Tell Me About It”, ambas en formato semi-acústico. Como os decía al principio, nos encontramos ante una obra que pasara sin ninguna repercusión en la historia de la música, pero que supone un gran esfuerzo de este buen vocalista, que ha logrado con tesón un magnífico álbum de AOR, muy personal y de enorme madurez.
Rafa Carrillo

GIGATRON "Mar de Cuernos (The Platinum Years)"

(Dynamo Records / Locomotive Music)

¡Vuelven los Dioses del Metal! ¿Hay alguien a estas alturas que no los conozca? ¿No tenéis su primer trabajo “Los Dioses Han Llegado”? En fin, por si hay algún despistado, no tengo más remedio que intentar explicar de qué van estos tipos. ¿Alguien recuerda el tema “Trip Metal”, de Tijuana In Blue? ¿Y el “Sancho Panza del Rock”, de Mamá Ladilla? Pues basta con imaginarse un disco entero en este plan, y ya tienes una idea. Desparrame y pitorreo por los cuatro costados. Se cachondean de todos los tópicos negativos que los ignorantes achacan al Heavy Metal: las drogas, la violencia, el sectarismo, la chabacanería. Lo lamentable es que hay algunos que no han sabido pillarles, creen que se tratan de críticas reales, cuando tanto nosotros como el propio grupo sabemos perfectamente que la mayoría de estos estereotipos son absolutamente falsos. Si alguien se ha ofendido, que escuche con más detenimiento el CD hasta que capte las ironías. Corre el rumor de que los músicos compatibilizan Gigatron con bandas heavies más convencionales, y me parece muy creíble. Canciones como “Quiero Rock” o “Tú Mismo” sólo pueden haber sido compuestas por gente que conozca bien el mundillo desde dentro. Y no hay subgénero con el que no se atrevan. El rock andaluz en “La Virgen de las Tachuelas”; las corrientes extremas en “Macho Cabrío”; las tendencias punkarras en “Marginado”; el rock and roll en “El Rock del Contenedor”; el power en la magistral “Banderas de Roña”. Y todo sin que falte calidad, si cantaran en otro idioma nos parecería un trabajo muy bueno y variado. No podemos olvidar al vocalista, es tan versátil que parece que cada canción está grabada por un tipo distinto. Imita a Yosi en “Ministro del Pisto”, se parece al Sevilla en “La Virgen de las Tachuelas”... y mejor no seguir. ¿Lo mejor de todo? No me atrevo a decirlo, pero si hay algo que me ha hecho reventar de risa han sido las tres partes de “The Warrior Of The Barrio” devastadora y merecidísima burla a los mayores payasos y fantasmas de la historia del metal, convertidos por su propia memez en una parodia de sí mismos. Sí, amigos, hablo de Manowar, ¿de quién si no? No se les menciona, pero sólo un sordo puede no darse cuenta de quién ha inspirado tan gloriosa historia. Si hace unos años pensé que Gigatron iban a quedar en una mera anécdota, estaba muy equivocado. ¡Tenemos Dioses del Metal para rato.
Nacho Jordán