25 noviembre 2005

HELLOWEEN "Keeper Of The Seven Keys - The Legacy"

(SPV / Mastertrax)

No es nada nuevo por parte de lo que queda de Helloween intentar sacar de algún modo partido de sus obras más celebradas. “¡Será su Keeper III!”, decía en los anuncios de las revistas especializadas cuando se publicó “Better Than Raw”. Y no hablemos de la portada de “The Time Of The Oath”. ¿Quién no reconoció al Keeper, aunque no se le mencionaba? No sé qué inventarán la próxima vez, pero seguro que no colará, como no coló antes ni cuela ahora. Al menos, no lo han denominado “Part III”. Ni siquiera ellos se atreven a eso, entre otros motivos porque hace quince años largos que se editó la tercera parte de los “Keeper”. Que se titulara “Heading For Tomorrow” y lo sacara Gamma Ray son detalles sin importancia. Kai nunca ha dejado de tocar temas como “Future World”, “I Want Out”, “Victim Of Fate”, “Ride The Sky” o “Save Us”. Encima, se apropió de Fangface como mascota. Y a nadie le ha parecido extraño ni censurable, será por algo. Sin embargo, su némesis Michael Weikath en todo este tiempo lo ha intentado todo y ha sido incapaz de convencer. En tantos años, la banda de la calabazas no ha dejado de dar tumbos y ha cometido meteduras de pata antológicas. Y la que ahora nos ocupa es una de las más gordas. Con este título, los actuales Helloween se han cargado ellos solitos la posibilidad, remota, pero posibilidad al fin y al cabo, de sacar en un futuro otro “Keeper” consiguiendo implicar a Hansen. A Kiske ya le damos por imposible. Aunque, en realidad, lo mejor era dejar las cosas como estaban. Los “Keepers” son irrepetibles desde que el batería Ingo tuviera la mala ocurrencia de arrojarse a las vías al paso del metro. En fin, tras esta larga introducción, creo que no sorprendo a nadie si digo que cualquier semejanza entre este “The Legacy” y las obras originales se reduce al nombre. Incluso las canciones mejor logradas, como la extensa “The King For A 1000 Years”, que para nada se hace larga, o “The Invisible Man”, recuerdan a los mejores momentos de “Master Of The Rings”, mucho más que a los discos que se pretenden continuar. La marchosa “Get It Up”, por dar otro ejemplo, la encuentro algo semejante a “Power”. También es buena el single “Mrs. God”. Un tanto extraña, casi diría enervante, pero de alguna forma funciona bien. Preciosa la balada “Ligth The Universe”, con Candice Nigth de invitada. El resto de composiciones, en general, me parecen aburridas, insulsas, del montón. Y tanta cantidad de temas termina cansando. Todo es cuestión de gustos, y no deja de ser mi opinión particular, tan discutible como la de cualquiera. El único corte que ha conseguido cierta semejanza con la época dorada es “Silent Rain”, con una caña parecida a la de “Eagle Fly Free”, y curiosamente, con un comienzo que me ha recordado a Hammerfall. Intentando ser lo más objetivo posible, al obviar que personalmente siempre he considerado el timbre de voz de Andi Deris inaguantable, diré que, en general, este doble CD es de lo mejor que ha sacado Helloween en los últimos tiempos. El listón no estaba demasiado alto.
Nacho Jordán