31 agosto 2005

ROYAL HUNT "Paper Blood"

(Frontiers / Mastertrax)

La genialidad del teclista, multiinstrumentista, productor, y unas cuantas cosas más, André Andersen vuelve a estar al servicio de la buena música, acompañado por otros tres buenos elementos. Royal Hunt publican un nuevo trabajo, y como casi todos los que nos han ofrecido hasta la fecha, lleno de calidad, clase y fuerza. Quizá sus entregas inmediatamente anteriores, “Eyewitness”, “The Watchers”, “The Mission”, se quedaron un poco a medias y nos hacían mirar demasiado hacia atrás buscando la mayor energía de sus primeros discos, pero con este “Paper Blood” no hace falta buscar tan lejos. Vuelven a su mejor sonido, directo, elaborado y lleno de matices técnicos, algo realmente difícil de combinar. Encontramos pelotazos directos al rostro, como “Not My Kind” en la que recuperan esos coros entrecortados a golpes de voz que tanto utilizaron en discos como “Clown In The Mirror”, probablemente su mejor obra, y que siguen siendo efectivos y pegadizos cien por cien. La inicial “Break Your Chains” tampoco se queda atrás, con una poderosa intro que nos lleva hasta un tema lleno de fuerza. “Never Give Up” es otro típico corte Royal Hunt, más melódico pero igual de intenso, con la voz de John West en una de sus mejores interpretaciones junto con el medio tiempo “Season’s Change” en la que rebosa sentimiento. Aunque en este disco en general encuentro a West algo menos brillante y protagonista que otras ocasiones. En “Kiss Of Faith” me recuerdan a sus compatriotas Fate, también de las más melódicas, pero con un toque muy original que hace que sea de las que más me han gustado. La más floja y monótona “Seven Days” y el tema título “Paper Blood” son de lo más cañero y oscuro del disco, desbordando esta última fuerza y energía, pero apoyándose en una estructura muy melódica a base de coros pomposos y teclados omnipresentes. Claro que lo de los teclados no debe extrañar a nadie, más aun cuando incluyen nada menos que tres brillantes piezas instrumentales que en ningún caso bajan de cuatro minutos, y en las que Andersen da todo un clinic de teclados, sobre todo en “Memory Lane”, bien secundado por el batería reintegrado a la formación, Keneth Olsen, y sobre todo por el guitarrista Marcus Jidell con el que comparte buenos duelos a lo largo del trabajo. De este último me quedo con lo que hace junto al teclista en “SK 983”, parece mentira que este tema haya sido escrito en una servilleta de papel de un avión durante un vuelo a Japón (ver entrevista), y en la extensa “Twice Around The World”, llena de matices y cambios de ritmo y en la que brillan todos por igual. Pronto les tendremos por aquí y podremos ver como llevan este buen disco al directo, esperemos que tan bien como se última visita en el 2002 junto a Pretty Maids, si así fuera estaríamos ante uno de los conciertos del año, sin duda.
Mariano Palomo