28 septiembre 2005

S.I.N. "Equilibrium"

(Metal Heaven / Goi Music)

“Equilibrium” supone la confirmación total de la calidad que ya puntaban en su primer trabajo este quinteto teutón hace un par de años. Aunque en esta ocasión más endurecido sobre todo por el sonido de las guitarras de Deddy Andler que mete una buena dosis de caña con sus cuerdas para dotar de fuerza e intensidad, no exentas de calidad y melodía, a las composiciones de la banda. La aportación del vocalista Jason Marks es también bastante notable, con un amplio abanico de tonos y registros que encajan en las líneas melódicas y contundentes de unos temas que en algunos casos recuerdan a la mejor época de Queensryche (“Empire”, “Oeration Mindcrime”), y que en su conjunto logran ese “equilibrio” que anuncia el título de la obra, entre la fuerza y la melodía; además esto completado con una buena producción a cargo del mencionado Andler y del también guitarrista y teclista Wolfgang Frank. El disco es realmente interesante, con pasajes muy conseguidos, con reminiscencias de sonidos contundentes, pero llenos de calidad, clase y melodía. Desde que rompen con “Nail To The Wall”, todo rezuma intensidad y destreza, un corte este inicial que recuerda mucho al “Eyes Of a Stranger” de los citados Queensryche. Por la misma senda siguen en “One Small Voice”, también interesantísimo con gran solo de guitarra. “It’s Forever” se torna más melódica con aires hard rockeros, con la notoria participación de Michael Voss haciendo un dueto con Marks, además de meter coros en todo el trabajo. “Walk Away” es una delicia de medio tiempo con buenas acústicas y coros, y con una construcción que me lleva a los tiempos de Glenn Hughes en Phenomena. “Fight For My Life” sigue en la línea, y con un toque más hard alemán (Casanova, Bonfire), llena de inmensos y contundentes coros complementado la gran voz de Marks. Otra colaboración aparece en “The Reason”, en este caso la del guitarrista de Wicked Sensation Michael Kelin, que aporta un buen solo para un correcto tema, algo más pesado que los anteriores. “Johnny’s Running” supone un punto más de originalidad, con algún toquecillo progresivo, pero siempre dentro de la línea hard rockera potente del disco, siendo en la que más destacan los teclados de Frank, un poco a lo Royal Hunt. Vuelven a sonidos más melódicos con “Nightwinds” con destacables coros, femeninos y masculinos, y con la contundencia de la base formada por Ouzo Raschke (bajo) y Alex Hlousek (batería), aunque no es el tema más rompedor del trabajo, un poco a lo Dokken última época. La cosa se pone aun más tierna con la balada acústica “For Getting Over Us” en la que el protagonismo recae en la voz de Marks, para dar cuerpo a una bonita composición. El cierre de la mano de “Winding Road” supone un potente colofón, para un disco que no debería pasar desapercibido para los amantes del hard melódico con bases potentes y buenos hachazos de guitarra. Muy recomendable.
Mariano Palomo